Redacción – Carlos Sainz todavía no ha decidido si estará en el Dakar 2020 o si por lo contrario dice adiós a la carrera más dura del mundo. A sus 57 años, el bicampeón del Dakar tiene dos opciones sobre la mesa y todavía mucho que pensar. Por un lado, podría volver a apostar por el proyecto de dos ruedas motrices de Mini, que el año pasado ya impulsó con su conocimiento para desarrollar un coche que todavía sufría demasiados fallos de juventud, de fiabilidad. Y por el otro, podría también pasarse a Toyota para conducir el 4×4 que triunfó el pasado año en las dunas de Perú. Y mientras analiza todas sus opciones, el español asistirá a la presentación oficial de la edición de 2020 cerca de Riad, la primera en la historia que se disputará en Arabia Saudí.
El piloto madrileño sigue analizando su futuro y de momento acudirá a la presentación para conocer más detalles de una carrera que se prevé de mucha duna, recuperando los 14 días de duración que se perdieron en 2019 por cuestiones logísticas en Perú.
Muy atento a todo lo que se diga debería estar también Fernando Alonso. Centrado en su preparación para las 500 Millas de Indianápolis, rodando este miércoles en el test abierto de la Indy500, un día después podrá conocer desde la distancia los primeros detalles oficiales de la cita de Arabia, en la que todavía debe pensar si participará en 2020 junto a Toyota después de las buenas sensaciones que obtuvo en el test de hace un mes con el Hilux campeón del Dakar.