Redacción – El despido de Jose Mourinho del Machester United le ha dejado vía libre a Florentino Pérez para la vuelta del portugués al Real Madrid. El presidente del club blanco nunca ha ocultado su admiración por el técnico y, de hecho, en los círculos más íntimos, reconoce que si hubiese sido por él, Mourinho no se habría ido del Bernabéu, pero fue el luso el que se quiso ir porque la situación era insostenible con el vestuario.

El nombre de Mourinho apareció con fuerza en el Real Madrid tras la destitución de Lopetegui el pasado mes de octubre. El portugués aparecía en las listas para coger el relevo del vasco, pero el hecho de ser entrenador del Manchester United frenó cualquier opción en ese momento.Ahora que Mourinho ya no está en Old Trafford y con Solari señalado en las altas esferas tras los últimos partidos, sobre todo tras el 0-3 del CSKA, el nombre del portugués ha subido muchos enteros en los despachos del Bernabéu.

El Real Madrid necesita una reestructuración en la plantilla de cara a la temporada que viene y Florentino Pérez le podría dar la responsabilidad de hacerla a Mourinho. Eso supondría la marcha de pesos pesados, como Sergio Ramos, que ya dijo cuando sonaba Conte que para el Madrid es mejor un entrenador con mano izquierda, como Ancelotti o Zidane. Eso tampoco es que le preocupe mucho a Florentino Pérez que es partidario de tener un sargento en el vestuario y no un amigo de los jugadores.

Sin duda, el gran obstáculo para el regreso de Mourinho al Real Madrid es la afición que no vería con buenos ojos la vuelta del portugués. Siguen existiendo muchos ‘mourinhistas’ entre los seguidores blancos, pero la gran mayoría no quiere el regreso del luso por cómo dejó al equipo y, sobre todo, viendo los éxitos que ha tenido el equipo sin él y en un ambiente mucho más calmado, sin las crispaciones que había con él en el banquillo blanco. Además, muchos aficionados consideran que el tiempo de Mourinho en el Madrid ya ha pasado y que no puede volver tras fracasar en el United, uno de los equipos históricos del fútbol mundial.

Florentino Pérez tiene muy en cuenta lo que piensa la afición porque sabe que si no acierta, los pitidos, los pañuelos pasarían del campo al palco y eso es lo que no quiere ver el presidente del Real Madrid.