Redacción – Los olimpistas pueden estar frustrados de su equipo, sienten impotencia porque su equipo volvió a perder una final, porque cayó ante el odiado rival, el Motagua.

Olimpia volvió a perder una final y ya suma tres años sin levantar una Copa, algo que pone a pensar a todos los hinchas.

El equipo merengue no había pasado una sequía de este calibre en torneos cortos y esto desespera a los aficionados.

Los directivos en los próximos días deberán tomar decisiones sobre el futuro de Olimpia, un equipo que se está acostumbrando al fracaso.