El argentino, Lionel Messi, no vivió una jornada brillante con el PSG, que ganó 2-1 al Olympique Lyon con un tanto de Mauro Icardi que asentó en el liderato al conjunto de Mauricio Pochettino.
A Messi de nuevo le faltó suerte y dejó otro disparo al larguero, el segundo esta semana y fue sustituido cuando el partido agonizaba y lucía un empate en el marcador.
Lo que si hubo en el duelo ante el Lyon fue el enojo del argentino al ser sustituido al minuto 76. Messi dejó el campo con un rostro seria y al momento de pasar frente al Pochettino mostró su inconformidad al esquivar el saludo del técnico.
Poco a poco trata de aclimatarse y en su quinto partido con la camiseta del cuadro francés volvió a quedarse sin marcar. Además, sustituido por Achraf en el minuto 76. Se marchó con semblante serio. No parecía contento.
Messi, como ante el Brujas en la Liga de Campeones, también se encontró con el larguero en uno de sus intentos. De falta, magistral, mandó un lanzamiento a la cruceta antes del descanso.