Redacción – Lionel Messi rompió el silencio y después de más de ocho meses explicó su alejamiento de la Selección Argentina, para hacer el duelo del Mundial de Rusia, y su regreso por su obsesión por ganar algo con la Albiceleste.

En diálogo con Radio Club Octubre 94.7 contó qué le pasa sobre todo lo que se dice sobre él y su actitud en la Selección: «No escuché nada. Sé que se está hablando mucho pero como se hizo costumbre últimamente. No me sorprende nada. Muchas mentiras y cosas inventadas. Me da bronca porque la gente cree en lo que se dice».

«Se hizo costumbre decir cosas de mí, inventar… darme cuando no estoy. La realidad es que vengo con una pubalgia de antes del parón de diciembre y vengo entrenando poco, no jugando todos los partidos».

Messi sólo jugó el primer partido de la doble fecha FIFA por su dolencia y explicó: «La pubalgia es complicada. No se saca de un día para otro. Me encuentro mejor pero no la limpié. Tengo que cuidarme».

Con respecto su alejamiento en silencio de la Selección, tras la eliminación en octavos de final del Mundial de Rusia, Leo remarcó: «Fue un golpe muy duro. De los peores que me tocó vivir en la Selección. Se dio todo mal desde el primer partido. No fue lo que queríamos y esperábamos».

«Pensé en cerrarme, hacer el duelo sólo con mi familia y olvidarme todo lo que había sido el Mundial, lo que había vivido. Intenté aislarme de todo un poco. De alejarme de la Selección».

«La generación fue maltratada. No somos de vender humo nosotros. Somos profesionales y la queremos».

Pero también dijo qué lo decidió a volver al equipo nacional, a pesar de las críticas.

«Yo quiero ganar algo con la Selección. Voy a jugar todas las cosas importantes. Mucha gente me decía que no volviera, familia, amigos… mi hijo me preguntó ¿Por qué te matan en Argentina?».

«No voy a decidir por un técnico o un jugador», aclaró y agregó: «No quiero convertir en realidad todas las mentiras que dicen».

«Se hace difícil disfrutar con este entorno de la Selección Argentina», lamentó.

Sobre el nuevo grupo de Argentina, Messi aceptó que es un nuevo ciclo y cree que hay que tener paciencia.

«Es normal el cambio de generación. Hay chicos muy buenos y mucho potencial. Fue un cambio muy brusco. Se tendría que haber hecho de a poquito, ir mechando jugadores jóvenes con experiencia».

«Es normal que se necesite tiempo y partidos para tener una Selección fuerte otra vez».

«Es momento de crecer y bancar a los chicos. No de matar», pidió.

«Si hubiésemos ganado en Brasil habría sido diferente. Hicimos todo bien para tratar de llevarlo, pero por por un detalle no se dio. Y a partir de ahí empezaron los quilombos».

«Es lo máximo ser campeón del mundo. No se paga con nada. Es único, lo más lindo».»Dios sabe por qué hace las cosas. Tal vez llegará en algún momento (la gloria)».

En referencia a las ideas del nuevo entrenador Lionel Scaloni sostuvo: «Empieza por ser un equipo sólido, fuerte que no le creen ocasiones, de estar bien parado cuando no tenemos la pelotas y cuando la tenemos abrirnos, jugar».

«Ellos (los jóvenes) se tienen que soltar, pero no jugar conmigo, sino con la Selección, por eso están ahí. Empezar a darles confianza. Después va a fluir todo».

«Yo soy el nuevo y me tengo que adaptar a ellos. Son más jóvenes», aceptó.

«Cuando vas a un grupo hay gente más grande y otra más joven», respondió Messi a las críticas a la convivencia del plantel que hizo meses atrás Mauro Icardi y cerró: «Cada uno va haciendo un grupo. Es normal. Me pasó cuando empecé. No por eso me trataban mal».

Pese a todo lo que sufrió con la Selección y que su gente cree que ya no debería volver, Messi dejó en claro que sabe que es una minoría la que no lo quieren.

«Siempre que fui a Argentina (a Buenos Aires o Rosario) la gente me mostró un cariño impresionante. Son los menos los que están buscando m…».

Y dejó un mensaje para quienes lo quieren y los que no: «Juego para mí, mi familia, mis compañeros y el que disfruta lo que hago. El que no me quiere me va a tener que seguir aguantando un poquito más».