El Manchester United necesitó tres minutos en la parte final del partido para remontarle al Manchester City y quedarse con el Derby de la ciudad. Eso sí, con polémica incluida.
Los goles de la remontada los hicieron el portugués Bruno Fernandes que equilibró la ventaja visitante que adquirió con el de Jack Grealish, y el de Marcus Rashford, el que dio la vuelta, el conjunto de Old Trafford se apuntó el derby local contra el Manchester City que reaviva la Premier.
La polémica llegó en el 80, cuando en una salida de pelota de Arron Wan Bissaka llevó la acción hacia Casemiro que centró al espacio hacia Marcus Rashford que estaba en fuera de juego. El atacante no tocó el balón que sí alcanzó Bruno Fernandes. El portugués, desde la media luna ejecutó un tiro que batió a Ederson. Inicialmente el línea anuló el tanto. Pero el árbitro lo concedió después.
En la agitación final salió vencedor y reforzado el cuadro de Erik Ten Hag que en su quinta victoria seguida en la Premier logró enterrar el dominio que el cuadro del español Pep Guardiola había logrado imponer en las últimas ediciones del cara a cara vecinal.
El acierto en los últimos minutos de los reds premiaron su meritorio esfuerzo, especialmente en la primera parte, en la que el acierto le dio la espalda. Necesitó un azote, un gol en contra, firmado por Kevin De Bruyne, para apuntalar su coraje volver a inclinar el choque hacia su lado, encontrar el acierto, y dejar en el teatro de los sueños los tres puntos.
Por fin. Llevaba tres derrotas seguidas en los derbys de Manchester el cuadro de Ten Hag, su peor racha desde la temporada 2013-14. Tenía pinta de que la tradición se iba a alargar también en esta campaña. Pero el United está al alza. Mucho tuvo que ver en el giro el joven argentino Alejandro Garnacho. La reacción red coincidió con su salida al campo, en sustitución de Christian Eriksen. De sus botas salió el gol del triunfo.
Poco tuvo que ver el Manchester city con el habitual. Eliminado de la Copa de la Liga días atrás, solo ha conseguido ganar dos de sus últimos cinco partidos. Su revés es una buena noticia para el Arsenal que haga lo que haga el domingo en el enfrentamiento local contra el Tottenham mantendrá la distancia de cinco puntos en el liderato. Aún hace cuentas el United que se sitúa a cuatro del equipo de Guardiola y a nueve del primer puesto. Ya ha dado caza al Newcastle, en la tercera posición.
Está disparado el Manchester United que cumplió su venganza después del 6-3 que encajó en el Etihad Stacium y que dominó al conjunto de Pep Guardiola durante la primera parte. Arrinconó al City, sin soluciones, con Erling Haaland desatendido y sin noticias de Kevin De Bruyne.
El United, que no ganaba un derby desde el 8 de marzo del 2020 en la Premier fue el único que pudo marcar antes del descanso. Todo el peligro llegó originado por Rashford, el hombre más inspirado del equipo. Pero no tuvo acierto.
Dio la sensación de que el fuelle local se quedó en el vestuario y tras el descanso el City recuperó el pulso al partido. Se hizo con el balón y empezó a acechar la meta de David De Gea. Tomó ventaja a la hora de encuentro, con una pincelada de De Bruyne que recibió por la derecha un balón de Riyad Mahrez, se adentró en el área, llegó a la línea de fondo y puso un balón perfecto sobre la cabeza de Jack Grealish que batió a David De Gea y abrió el partido.
Las sensaciones no eran buenas para el United que sufrió con el gol un duro mazazo. Sin embargo, todo cambió en los últimos diez minutos. En el 80, una salida de pelota de Arron Wan Bissaka llevó la acción hacia Casemiro que centró al espacio hacia Marcus Rashford que estaba en fuera de juego. El atacante no tocó el balón que sí alcanzó Bruno Fernandes. El portugués, desde la media luna ejecutó un tiro que batió a Ederson. Inicialmente el línea anuló el tanto. Pero el árbitro lo concedió después.
Tres después llegó la remontada que dio al Manchestr United el triunfo final. Un pase de Bruno a Garnacho que se deshizo de su marcador, el neerlandés Nathan Aké para enviar un centro al área pequeña donde estaba Rashford que no falló. El ídolo local no faltó a su cita con el gol. Ha marcado en todos los partidos desde que se reanudó el fútbol tras el mundial. En esta ocasión, para dar una victoria memorable a su equipo.