El francés Fabio Quartararo ha conquistado su segundo triunfo seguido en el Mundial de MotoGP y se coloca como nuevo líder de la competición tras cumplir los pronósticos a pesar de una mala salida, pero el ritmo que había exhibido en entrenamientos lo ha transformado en escapada cuando y como ha querido en el GP de Portugal en Portimao.
Pecco Bagnaia y Joan Mir le han acompañado en el podio, primero para el campeón mundial este 2020, con Marc Márquez completando su primera carrera en nueve meses en el puesto séptimo. Y tras su celebración 2020 a lo Kilian Mbappé, su compatriota, ahora se ha inventado una a lo Cristiano Ronaldo, grito de ‘siiiiu’ y vuelta incluida, este fan de la Juventus.
Marc Márquez había planteado este sábado su duda de si podría terminar la carrera a 25 vueltas, 114,8 kilómetros seguidos entre pecho y espalda. Le habían advertido sus doctores y su fisioterapeuta antes de hacer su debut en Portimao tras 265 días de baja que iría de más a menos físicamente y que tendría que hacer frente a fuertes molestias en dedos, antebrazo y codo derecho que siente ante el sobreesfuerzo. Pero si Marc a un giro necesitó apoyarse en las dos Suzuki para pasar a la Q2 (gracias a Mir) y meterse sexto en parrilla (gracias a Rins) para el ritmo sí tendría que pelearse consigo mismo y con su límite del dolor y la fatiga.
De inicio estrategias distintas para los neumáticos y si el delantero medio fue la elección de todos salvo Petrucci para el trasero las KTM y las Yamaha decidieron tomar un camino distinto y optar por el duro en lugar del medio. Y entre ellos favoritos como Oliveira, el ganador del año anterior con Grand Chelem incluido, aunque este domingo saliera de cuarta fila, y Quartararo que venía de ganar la anterior carrera.
Desde la pole Quartararo ha perdido la iniciativa como estaba previsto, tienen un gravísimo problema las Yamaha con las salidas que deben corregir si quieren optar al título, y Zarco, Rins, Marc Márquez, Miller y Mir le han ganado la partida con Maverick Viñales, la otra Yamaha oficial, vigésimo y penúltimo desde la 12ª plaza en parrilla. También Pol Espargaró ha tenido problemas en las vueltas iniciales y ha acabado abandonando en el cuarto giro.
El líder Zarco ya ha puesto en fila a todo el mundo perseguido por las Suzuki de Rins y Mir que se ha visto implicado en un incidente en la curva 3 cuando Márquez le ha tocado por detrás y ha perdido posiciones el de Repsol Honda lo que ha aprovechado Quartararo para llegar y ponerse cuarto.
Ese terceto al que ha llegado Marc Márquez en la primera vuelta ha sido su canto de cisne porque en la tercera vuelta ha caído a la novena plaza, posición en la que se ha mantenido en el primer tercio de carrera tras Aleix Espargaró intentando evitar más problemas y cerrando el grupo perseguidor de la cabeza. Luego ha ido progresando por las caídas hasta terminar séptimo justo por detrás de Aleix Espargaró y por delante de su hermano Àlex a 13” de la cabeza. Y aplauso unánime de todo el box Repsol Honda a su llegada. Y sentado en su silla no ha podido evitar las lágrimas, no era para menos tras lo mal que lo ha pasado y las dudas que han pasado por su cabeza en nueve meses de infierno.
A partir del décimo giro ha empezado Marc a mejorar sus tiempos por vuelta cuando a lo largo del GP no había pasado de hacer tandas máximo de siete giros. Necesita kilómetros y ha encontrado su sitio para hacerle la puesta a punto a su brazo, lo demenos eran los puntos a obtener. No es Portimao un circuito para grandes machadas, es uno de los más exigentes físicamente y nunca había competido antes en él.
Alex Rins, tras varios intentos, ha consolidado al fin el adelantamiento sobre Zarco y menos se lo ha pensado Quartararo para atacar a continuación a su compatriota en el sexto giro. Y un giro después Mir ha hecho lo propio, pero se la ha devuelto. El cuarteto ya se ha quedado en cabeza con casi un segundo sobre Morbidelli.
Al inicio del noveno giro Quartararo ha decidido pasar al ataque y ha superado, toque incluido, a Rins. Si sacaba del bolsillo el ritmo que se había guardado podía el francés ya romper la carrera, pero las Suzuki han seguido calcando su ritmo tras soltar a Zarco hasta que al llegar al ecuador de la carrera ha hecho el cambio de ritmo, un órdago que solo Rins se ha atrevido a aceptar aunque ha ido con el gancho y a siete giros del final Rins ha cometido el error y se ha ido al suelo en la curva 5.
Quartararo ya se ha quedado solo a por su segundo triunfo seguido con 4”5 sobre Zarco y Bagnaia que también ha superado a Mir, se ha enganchado el mallorquín como una lapa a las Ducati. Un giro después tampoco Zarco ha podio evitar la caída en la curva 11 con la que entrega el liderato a su compatriota.
Dos de los hombres de los que se esperaba más este 2021 también se han ido de vacío, Jack Miller ha caído en el noveno giro y Valentino Rossi, duodécimo en la primera carrera y ya fuera de los puntos en Losail-2 ha firmado un nuevo cero en Portimao por caída. Acababa de llegar en su remontada al undécimo puesto tras superar a su hermano Marini y se ha ido al suelo. Si en Jerez, uno de sus jardines favoritos, no retoma el timón ‘Il Dottore’ difícilmente le veremos concederse un año más en MotoGP.
Por lo que respecta al resto de españoles tras ese 6º al 8º de Aleix, Marc y Àlex Márquez, undécimo Maverick Viñales de 16 que han terminado y 15º Lecuona que reaparecía tras su operación de síndrome compartimental. Caída de Rins y Pol Espargaró se ha retirado en el cuarto giro.