Dani Alves tendrá que permanecer encarcelado luego que juzgado español rechazó este lunes otra solicitud del futbolista brasileño para ser puesto en libertad bajo fianza mientras se le investiga por una denuncia de agresión sexual en su contra.
La Audiencia de Barcelona dictaminó que sigue existiendo un riesgo de fuga con Alves, por lo que tendrá que continuar detenido hasta que se complete la investigación. El juzgado ya había negado un pedido similar de la defensa de Alves en mayo.
Alves fue detenido provisionalmente en enero tras ser acusado de agredir sexualmente a una mujer en una discoteca de Barcelona el 30 de diciembre. El internacional brasileño ha negado las acusaciones y sostiene que el encuentro fue consensuado con la mujer.
Una juez ordenó que el ex lateral derecho del Barcelona permaneciera en la cárcel sin derecho a fianza tras analizar los resultados preliminares de la investigación de las autoridades y escuchar los testimonios de Alves, la presunta víctima y testigos. Aún no se ha fijado una fecha para el juicio.
Los abogados de Alves han tratado de desacreditar el testimonio de la presunta víctima y otros testigos al presentar los videos de seguridad que muestran a la víctima coqueteando con Alves en la discoteca.
Pero el juzgado respondió este lunes indicando que «dicho comportamiento, aun cuando se tratara de un típico cortejo sexual entre dos adultos como afirma la defensa, no puede en modo alguno justificar una posterior agresión sexual».
La defensa de Alves asegura que el futbolista no representa riesgo de fuga y que tiene la disposición de aceptar todo tipo de medidas, como entregar sus pasaportes y portar un dispositivo de rastreo si se le otorga la libertad bajo fianza.
Añadieron que Alves y su familia planean vivir en Barcelona, pero el juzgado rechazó la argumentación debido a que sus hijos se registraron para residir en la ciudad hace unas cuantas semanas atrás.
La ley de consentimiento sexual aprobada en España el año pasado incluye una amplia gama de crímenes en el término agresión sexual con diferentes penas. Una condena por violación puede suponer hasta 15 años de prisión.
Alves, de 40 años de edad, ganó 42 títulos en su carrera, incluyendo tres Ligas de Campeones con el Barcelona y dos de la Copa América con Brasil. El año pasado disputó su tercera Copa Mundial en Qatar.
Al momento de su detención jugaba para los Pumas de la Liga MX.
