Redacción – El Real Madrid despidió con una nueva derrota la temporada haciendo honor a lo que ha sido para el club blanco: desastrosa. Los blancos recibían al Betis con la intención de darle una alegría a la afición del Bernabéu. Esa era la intención porque la realidad fue otro partido para olvidar de un equipo al que tiene pinta que no va a ser fácil recuperar por mucho que Zidane esté convencido de poder hacerlo.

Un Zidane que sí permitió las despedidas de Keylor y Llorente en el césped, pero no la de Bale que comenzó y acabó en el banquillo sin ni tan siquiera calentar. Entró en la convocatoria, pero ése fue el único gesto amable que tuvo Zidane con el galés. El que se despidió a lo grande fue Keylor Navas, ovacionado por el Bernabéu y que salvó a los suyos en un par de ocasiones.

El de Costa Rica fue el protagonista blanco ante un Betis que ‘bailó’ al Madrid en la primera mitad, pero que no acertó con el gol gracias a las intervenciones de Keylor. El portero fue el ángel de la guarda de sus compañeros que ni estaban ni se les esperaba en un primer acto para olvidar. Sólo Vinicius y Brahim aportaban algo de esperanza a un Madrid que cometía muchos fallos,algunos inexplicables, ante un Betis muy ordenado, que presionaba la salida de balón blanca. Los de Setién mandaban en el encuentro, pero no creaban ocasiones claras y cuando lo hacían, aparecía Keylor o el asistente para pitar fuera de juegos inexistentes, como el pasó a Lo Celso.

El Madrid apareció en escena en el minuto 34 con un disparo al poste de Benzema en la mejor y única ocasión blanca de una primera mitad a la que se llegó sin goles y que acabó con la afición blanca pitando a los suyos.

El Real Madrid salió más ‘enchufado’ en la segunda mitad y se acercaron más al área de Pau de todo lo que hicieron en la primera. Apareció Benzema y le llegaron más balones a Vinicius. Ambos tuvieron ocasiones para marcar, pero el que lo hizo fue el Betis por mediación de Loren en el minuto 61 de partido. El delantero remató una buena jugada del equipo andaluz que acabó con ese 0-1 y con la bronca de la afición de Chamartín. Antes de eso, el Betis pidió la roja a Carvajal por una falta sobre Junior que Undiano señaló como amarilla con el enfado de los de andaluces.

A los de Zidane les tocaba remontar, pero seguían sin ideas mientras era el Betis el que estaba más cerca de volver a marcar. En ese contexto, Zizou sacó a Marco Asensio y Lucas y Setién dio entrada a Jesé, ovacionado por el Bernabéu. La puntilla para los blancos la puso Jesé en el minuto 75 con el 0-2 de Jesé tras una gran jugada de Junior. Un gol celebrado por el Bernabéu por su autor pero que provocó la bronca unánime de todo el estadio para los de Zidane.

Los aficionados comenzaron a desfilar de un Bernabéu que seguía pitando a los de Zidane que continuaban haciendo poco o nada en el campo. El Betis, por su parte, buscaba a la contra el tercer tanto. No llegó ese gol, pero lo que sí llegó y para quedarse fue la bronca de los seguidores blancos que sólo aplaudieron a uno de los suyos: Keylor Navas.

Unos aplausos que no acallaron la bronca del Bernabéu con la que acabó esta temporada un Real Madrid que se despidió de los suyos con una derrota que, por otro lado, es la mejor imagen para resumir lo que ha sido esta campaña para los blancos.