El culebrón de Lionel Messi va quemando etapas con idas y venidas, persecuciones por las calles de Barcelona, reuniones y esperas que este jueves por la mañana alumbró una nueva posibilidad: la permanencia del futbolista en el Barça esta temporada.
La opción tomó cuerpo cuando, un día después de afirmar que la permanencia de Leo en el Barça era, es, «muy difícil», Jorge Messi se mostró menos contundente con un enigmático «no sé», que algunos interpretaron «sí» a esta posibilidad de que el crack argentino pudiera dar marcha atrás y cumplir su contrato.
Después de una primera reunión celebrada en la tarde del miércoles en las oficinas del club azulgrana entre Josep Maria Bartomeu y el padre de Messi, en la que estuvieron presentes también su hermano y el abogado Jorge Pecourt y en la que no se llegó a ninguna entente, manteniendo las dos partes sus posturas iniciales, la situación podría comenzar a variar, entendiendo Messi que la intransigencia del Barcelona no le ofrece demasiadas alternativas legales, por cuanto seguir adelante con su intención de abandonar el club dirigiría el desencuentro a un camino judicial de desconocida resolución.
El Manchester City, que acude al escenario como el club más interesado en hacerse con la incorporación de Messi, solo se plantea su llegada con la carta de libertad, tal y no está en disposición de entrar en ningún conflicto con el Barcelona, lo cual dificultaría la marcha del crack, necesitado de un club que solicitase el transfer internacional a la FIFA pendiente de esa resolución judicial futura…
Y que podría ‘condenarle’ a pagar una cifra que, sin ser quizá los 700 millones de euros que exige el Barcelona, fuera lo suficientemente alta, por encima quizá de los 350 millones, que se convirtiera en inasumible en sus planes financieros.
Jorge Messi permaneció durante toda la mañana de este jueves en su despacho de la Fundación, al que acudió después su hijo Rodrigo, y a primera hora de la tarde lo abandonó desplazándose al domicilio de Leo en Castelldefels, donde quedó recluida toda la familia para, se entiende, estudiar la situación actual del caso y los siguientes pasos a dar, que podrían comenzar a conocerse después de que el padre del crack se marchase de la casa de su hijo apenas una hora y media después de su llegada.
Desde el Camp Nou una fuente aurotizada del Barcelona admitió a ESPN Deportes que el club está «a la espera» de conocer las intenciones de Messi tras el contacto directo del miércoles, advirtiendo que la postura de Bartomeu se mantiene inalterable y manteniendo la puerta abierta a acabar con el conflicto de manera tranquila, con el reingreso de Leo a la disciplina del equipo para ponerse a las órdenes de Ronald Koeman.
De momento la pelota está en el tejado de Leo Messi y sus asesores…