El jugador hondureño, Jason Sánchez, quién pertenece a Motagua y había sido cedido al Honduras Progreso, se tuvo que regresar a Tegucigalpa junto a sus compañeros Juan Gómez y Fabricio Galindo porque fueron amenazados.
Según una fuente, los jugadores azules recibieron mensajes y llamadas de amenaza mientras estaban en El Progreso y por eso tomaron la decisión de abandonar la ciudad.
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— Mi Pasión (@MiPasionhn) January 7, 2023
Después de lo ocurrido Jason Sánchez redactó un emotivo mensaje en sus redes sociales y aunque no dio detalles de lo ocurrido dio gracias a Dios porque se encuentran bien.
“Primero que nada quiero agradecer al equipo Honduras Progreso por abrirme las puertas de su institución, lastimosamente por temas extra cancha no sé pudo concretar todos nuestros planes a nivel futbolistico”, escribió.
Añadió “segundo, quiero agradecer a mis amistades y personas cercanas por preocuparse por mi salud y la de mis otros compañeros, gracias a Dios no llegó a más la situación y estamos en nuestros hogares con nuestras familias”.
Los tres jugadores pertenecen a Motagua y la directiva del azul tendrá que tomar una decisión sobre el futuro de ellos.