Redacción – El FC Barcelona atacará en verano, otra vez, el fichaje de Neymar. El club azulgrana, que va perfilando la planificación de la próxima temporada con la necesidad evidente de no repetir los errores de ésta, tiene en el delantero brasileño a un objetivo primordial, avalado desde el vestuario y considerado, a pesar de las reticencias que despierta en el entorno, un futbolista que, resumió una fuente del club a ESPN Digital, “marca las diferencias”.
Los dos diarios deportivos de Barcelona, Mundo Deportivo y Sport, coincidieron este miércoles en apuntar a Ney como objetivo prioritario, dando cuenta el primero de ellos que la operación en el verano de 2020 se contempla más factible gracias a una de las cláusulas del artículo 17 del Reglamento sobre el Estatuto y Transferencia de Jugadores que indica ‘un periodo de tres temporadas completas o de tres años, lo que ocurra primero, tras la entrada en vigor de un contrato; si el contrato se firmó antes de que el jugador profesional cumpliese 28 años, o por un periodo de dos temporadas completas o de dos años, lo que ocurra primero, tras la entrada en vigor de un contrato, si el contrato se firmó después de que el jugador profesional cumpliese 28 años’.
Cumpliendo su tercera temporada en el PSG y no habiendo renovado su contrato, que acaba en junio de 2022, Neymar podría acogerse a esta norma, estableciendo la FIFA una cláusula de salida calculada con diversos conceptos a partir del coste de su fichaje en 2017 y que establecería el coste de su transferencia, que se especula en torno a los 180 millones de euros, una cifra menor a los 222 millones pagados en su día por el PSG aunque, a la vista de la realidad financiera actual del Barcelona difícil, de entrada, de asumir.
El club azulgrana, sin embargo, estima viable el regreso del jugador brasileño, por quien ya negoció durante el verano de 2019 y que mantiene el favor del vestuario, con Messi a la cabeza, para reforzar una plantilla a la que Josep Maria Bartomeu quiere dar un impulso en el último año de su mandato presidencial, que acaba en 2021.