El Barcelona trabaja en una rebaja salarial que afectará a todos los empleados del club, incluidos los deportistas profesionales, y que se llevará a cabo a partir de la creación de una Mesa de negociación impulsada por la Junta Directiva para “ajustar las condiciones de trabajo de su plantilla corporativa y deportiva a la nueva realidad económica provocada por la extraordinaria reducción de ingresos previstos para esta temporada”, reconoció a ESPN Deportes una fuente del club azulgrana.

La medida alcanzará a la primera plantilla del equipo de fútbol, que ya a finales del pasado mes de marzo aceptó una rebaja del 70 por ciento de su salario durante el tiempo que durase el estado de alerta por la pandemia del coronavirus y que, sumado a las demás plantillas deportivas profesionales y departamentos del club significó un ahorro de 49,2 millones de euros, especificó a mediados de junio, cuando finalizó el estado de alarma en España.

La situación económica, sin embargo, sigue siendo de especial gravedad en el Camp Nou, señalando la fuente consultada que el club se debe adecuar a “esta nueva realidad como consecuencia del COVID” y relatando que ya se llevan meses con la misma afectación, aunque las medidas adoptadas “habiendo tenido una incidencia muy importante no son suficientes para equilibrar la caída de ingresos que está generando la pandemia”.

Así se entiende este inverosímil mercado de traspasos protagonizado por el club azulgrana, más ocupado en rebajar la masa salarial de su plantilla con todos los esfuerzos necesarios pero que no fue capaz de reforzar la plantilla de Ronald Koeman como pretendía, con los fichajes fallidos de Eric García y Memphis Depay, a pesar de las facilidades que le dio a última hora el Olympique de Lyon.

El Barcelona, publicó TV3, remitió el escrito enviado por el club a sus futbolistas en el cual notifica que debe iniciarse un proceso para modificar las condiciones de trabajo, argumentando esa decisión en el fuerte descenso de ingresos debido a la pandemia, que se calcula por encima de los 155 millones de euros, y provoca la creación de esa Mesa de negociación ‘regulada por el artículo 41 del Estatuto de los trabajadores’, se incidió desde la entidad.

‘Se constituirá una Comisión Representativa en la que se integrarán representantes del Club y del colectivo laboral en que se debatirán las medidas propuestas por el club durante un periodo de quince días’ se señaló, especificando que los acuerdos de dicha comisión ‘se adoptarán por mayoría de los miembros de cada representación’.

Una vez cerrado el ejercicio económico de la temporada 2019-20, arrojando unas pérdidas de 97 millones de euros, el vicepresidente Jordi Moix advirtió de las dificultades a las que se enfrenta el Barcelona. “Ahora toca remar, ajustar el barco para llevarlo a buen puerto y que la crisis afecte lo menos posible a corto plazo” explicó, dando cuenta que este recorte salarial era un asunto que debería tratarse abiertamente.

Las advertencias de Moix se tradujeron de forma inmediata en el comunicado que el club remitió a sus futbolistas y en el cual se anunció ‘el inicio del procedimiento’ instando a los componentes de la plantilla a proceder ‘a la elección ad hoc de una persona de la plantilla que represente el colectivo del fútbol profesional masculino y lo notifiquen de manera fehaciente a la Dirección para las Personas del Fútbol Club Barcelona con el fin de constituir adecuadamente la Comisión dentro de los términos legalmente previstos’.