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domingo, diciembre 22, 2024
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Barcelona no tuvo fiesta en el Joan Gamper y fue goleado por Mónaco

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El Barcelona perdió 3-0 en su primer juego de la temporada en su estadio

El Barcelona no tuvo fiesta en el Joan Gamper y fue goleador 3-0 por Mónaco

Mal regreso a Montjuïc en el partido que se disputaba el Joan Gamper, que es el partido de presentación de las nuevas sensaciones del Barcelona previo al inicio de LaLiga.

El Mónaco dejó al descubierto la falta de rodaje y las carencias de un Barça bisoño, con jugadores clave faltos de minutos y sobre todo con referentes veteranos que no están a la altura.

De momento, por supuesto; estamos en verano y hace cuatro días las sensaciones eran estupendas en Estados Unidos.

El Barça enérgico, intenso, lúcido y combativo de la gira fue apagándose ante el Mónaco tras un buen inicio.

El Barcelona se presentó en su Festa Major de agosto con la promesa de ilusión de un nuevo proyecto. Y se vieron cosas, como la personalidad de Casadó en la medular, pese a que fue repetidamente objeto de recriminaciones, y con aspavientos, de algunos de los veteranos, como Raphinha o Gündogan.

En el caso del alemán, la regañina al chaval llegó al ir a tirar un córner de forma tan defectuosa que corrió para rectificar, en su carrera cometió falta y el choque con el defensa del Mónaco se abrió la ceja y tuvo que ser sustituido. Y también aparecieron lagunas de juego preocupantes a posos deías del inicio de LaLiga.

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Barcelona no tuvo fiesta en el Joan Gamper y fue goleado por Mónaco.

FLICK Y SU MAL COMIENZO

Con una apuesta valiente de Flick por el esquema que mejor le había rendido en la gira, el Barcelona afrontó con un equipo muy joven a un rival rodado y con oficio, el Mónaco, que supo esperar su momento en el Gamper mientras en el Barça los veteranos, sobre todo un Lewandowski fallón, protestón e ineficaz, eran una rémora que acabaron tapando la ilusión de los jóvenes.

Al Barcelona le faltó lucidez, pero el partido había comenzado a toda pastilla. Ni un minuto había transcurrido cuando una transición con quiebro y centro por la izquierda de Raphinha dejó solo a Pau Víctor en la frontal del área pequeña. Pero, como si la magia de la gira se hubiese esfumado, remató alto.

BARCELONA NO TUVO SU MEJOR PRESENTACIÓN

Gran ocasión que pudo hacerlo todo más fácil y que se alternó con dos balones del Mónaco a la espalda de la defensa azulgrana, el segundo de los cuales fe salvado por Iñigo ante Embolo, que reclamó empujón y penalti.

Otras oportunidades fueron un cabezazo de Iñigo a la salida de un córner lanzado por Pablo Torre y un disparo de Lewandowski que puso a prueba al meta Kohn.

El Barcelona, con Marc Bernal en el mediocentro, respaldado por Marc Casadó a la derecha y Pablo Torre algo más avanzado a la izquierda, dominaba, aunque adolecía de cierta lentitud y tenía dificultades cuando el Mónaco trataba de salir por las bandas, obligando a Iñigo y Christensen a tirar de oficio y multiplicarse para salvaguardar la portería.

No acababa de hilar filo el equipo y hubo algunas pérdidas de balón peligrosas, con la línea defensiva avanzada, de Balde, de Casadó o de Marc Bernal, y el dominio del juego fue poco a poco remitiendo, mientras el Mónaco se iba asentando y desactivaba las conexiones de la medular que en el primer tramo de partido habían marcado el ritmo del juego.

La afición estaba vitoreando a Lamine Yamal tras salir del banquillo a calentar en la banda, recién iniciado el segundo tiempo, cuando Marc Bernal se despistó en un pase de Iñigo, un pase arriesgado ciertamente a la frontal del área. Camara, perfectamente vertical ante portería, le robó la cartera desde atrás y superó a Ter Stegen sin problemas en el cara a cara.

Barcelona no tuvo fiesta en el Joan Gamper y fue goleado por Mónaco.

AL BARCELONA LE FALTA MUCHO

Al Barcelona le hacía falta un chispazo de inspiración para reaccionar, pero lo que llegó fue un mazazo en forma del segundo gol del Mónaco. Un pase entre líneas de Minamino en diagonal hacia el centro del área encontró en posición dudosa protestada por el Estadi Olímpic a Embolo, que tampoco falló ante Ter Stegen, con un Barça apático en defensa.

Otro Barça mostró la cara tras la entrada de Lamine Yamal y Ferran Torres. Y también la salida de Gündogan, por apertura de ceja, y Lewandowski. Raphinha se situó de mediapunta, Ferran en sus primeros minutos de extremo izquierdo y Pau Víctor, de nueve.

Lamine Yamal tardó menos de un suspiro en inventarse una diablura y mandar un pase vertical a Pau Víctor, cuyo remate se perdió por muy poco. Ya en el descuento, siguió generando mucho más que los veteranos en más de una hora.

Al Barça esa reacción, sin embargo, le duró poco, con Lamine Yamal recién incorporado al equipo, como Ferran Torres. El Mónaco se refrescó con los cambios y puso la puntilla a cinco minutos del final, con Montjuïc sustituyendo la molesta ola que se había vivido pese al resultado por silbidos.

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