Redacción – Desde el pasado 14 de abril, en el fortín de Ferrari en Maranello han tenido que triplicar los esfuerzos en analizar y tratar de arreglar el decepcionante inicio de campaña de los italianos tras las tres primeras carreras, que terminaron con pleno de dobletes de Mercedes. Hacía 27 años que un equipo no empezaba copando las dos primeras plazas de las tres citas iniciales del campeonato y en Ferrari estas dos semanas de parón han sido absolutamente claves. Lo apuntaba Vettel al bajarse del coche en Shanghai después de lograr la tercera posición, ocupando solo el cuarto lugar en el Mundial a 31 puntos ya del vigente campeón y actual líder, Lewis Hamilton.
“Obviamente no es bueno perder puntos o posiciones tan pronto. Es un momento muy importante para averiguar por qué no somos tan fuertes como querríamos ser. Hay que entender qué debemos hacer. Estas semanas serán importantes para marcar el rumbo para las próximas carreras”, dijo el teutón, admitiendo que pese a mejorar el rendimiento de su SF90 tras Australia, el coche sigue sin comportarse como lo hacía en los test de Barcelona.
“No podemos jugar tanto con el coche como lo hacíamos en Barcelona y nos está costando replicar esa sensación. Hemos tenido una perdida mayor que el resto y eso ha marcado una gran diferencia”, analizaba el germano antes de que el equipo tratara de reaccionar estudiando la situación y buscando la solución a sus problemas de cara a la cita de esta semana, en Bakú. Precisamente, este fin de semana Vettel volverá a una pista que le trae malos recuerdos por lo ocurrido el pasado curso, cuando cometió un fallo de pilotaje que le relegó a la cuarta plaza al ser demasiado agresivo ante Bottas. Por no hablar de lo sucedido en 2017, cuando se enzarzó en una fea pelea con Hamilton en pista. ‘Seb’ quiere resurgir en Azerbaiyán en un momento crucial en el que Leclerc aprieta con fuerza.
En Bakú, el monegasco firmó el pasado año su mejor carrera con una sexta posición al volante de un Sauber. Aviso para Vettel, que igual que Charles buscará su primer triunfo en una cita en la que el Ferrari podría ser superior por su mayor velocidad punta en un trazado que tiene la recta más larga del campeonato (2.1 km)