Cinco años después de haber sido presentado como entrenador del Real Madrid (interrumpidos por propia voluntad durante nueve meses), Zinedine Zidane se apresta a afrontar un nuevo reto que le puede dar un nuevo trofeo tanto al conjunto blanco como a su propio palmarés: si los madridistas se proclamasen campeones de la Supercopa el domingo en Sevilla, sería su 12º título en 237 encuentros. Hasta ahora, el entrenador francés acumula 235 encuentros dirigiendo a la primera plantilla blanca con el siguiente balance: 155 victorias (66%), 48 empates (20%) y 32 derrotas (14%). Se colocaría a sólo dos títulos de igualar el récord de Miguel Muñoz, que en sus 14 campañas como técnico madridista logró 14 títulos (nueve Ligas, dos Copas de Europa, dos Copas de España y una Copa Intercontinental).
La diferencia radica en que Zidane apenas ha necesitado ese lustro para lograr esos 11 que le igualan en el ránking con Johan Cruyff, que también sumó 11 campeonatos con el Barça. Por delante tiene al mencionado Miguel Muñoz y a Guardiola (con el Barça), ambos con 14 títulos.
No obstante, el palmarés de Zidane no es corto. Tres Champions logradas de manera consecutiva, algo que no se había visto nunca con el nuevo formato y que hay que remontarse hasta la década de los 70 para ver algo similar con el Ajax, primero (1971-73), y el Bayern después (1974-76), sin olvidarse de la época dorada en la Copa de Europa donde los blancos dominaron desde 1956 hasta 1960. Añadan dos Ligas, dos Supercopas de España, dos Mundiales de Clubes y dos Supercopas de Europa: en total, ha ganado un título para las vitrinas blancas cada 22 encuentros que ha dirigido a los blancos. Sólo le falta la Copa del Rey para culminar un palmarés espectacular. Un trofeo que, curiosamente, ya se le resistió como jugador blanco: jugó dos finales (2002 y 2004) y perdió ambas…
Por detrás de Muñoz y de Zidane aparecen nombres ilustres en el santoral de técnicos madridistas: Luis Molowny, que ganó ocho trofeos, y Vicente del Bosque, que levantó uno menos, siete. Todos tienen el mismo denominador común: fueros hombres de club que no dudaron en aceptar retos complicados en etapas difíciles. Y todos salieron campeones…
Zidane decidió marcharse en el verano de 2018 tras ganar su tercera Champions consecutiva. Sumaba nueve títulos cuando decidió dar un paso a un lado. El entrenador francés adujo motivos personales. “Si creo que no voy a ganar, es mejor hacer un cambio”, aseguró en conferencia de Prensa el 31 de mayo de 2018, antes de explicar que podría regresar (“Claro que puede ser un ‘hasta luego’. Voy a estar cerca de este club siempre”). Algo que cumplió en marzo de 2019 para ir perfilando la plantilla en los 11 últimos partidos de Liga que quedaban. La campaña siguiente volvió a ganar la Liga, la del Coronavirus, un campeonato con dos tramos futbolísticos: en el segundo periodo el Madrid enlazó 10 victorias consecutivas en los últimos 11 encuentros para asegurar la Liga 34. Ahora llega a Andalucía. Primero a Málaga, donde curiosamente ganó su primera Liga en La Rosaleda al derrotar a los locales en 2017 para sellar la primera Liga después de cinco años. Luego, el domingo, si elimina al Athletic Club, le tocará el Barcelona o la Real Sociedad en la final de La Cartuja (21:00 horas, #Vamos).
También es llamativo su historial en finales: ha disputado nueve y ha ganado las nueve. Un pleno increíble. Guardiola, por poner un ejemplo, ganó ocho de sus primeras nueve finales. Es un dato que avala su trayectoria como entrenador de alto nivel, aunque sabe que algún día le llegará la primera derrota. Pero él se ve ganador en Sevilla. Significará que sigue engrosando la Sala de Trofeos del nuevo Bernabéu…