El partido finalizó 3-2 a favor de los dirigidos por Pep Guardiola
Manchester City sufre, pero derrota al Leeds United gracias a Phil Foden.
No hay ni rastro de esa máquina perfecta que era hace dos temporadas el Manchester City. Ni siquiera a pesar de haber mejorado notablemente tras la pasada temporada, porque el equipo sigue teniendo momentos muy grises, aunque un renacido Foden esta vez le hizo ver la luz con un tanto en el descuento, su segundo del partido, para doblegar al Leeds United (3-2).
Ni color lo sucedido entre ambas partes radicalmente diferentes. En la primera, la superioridad del City era hasta insultante. Reflejada a los segundos de partido incluso, con un tanto del de momento desaparecido Phil Foden. Jugada inteligente entre Bernardo Silva y Matheus Nunes por derecha y el último acabó centrando para que el inglés marcara gol. Un tanto para superar a Beckham en Premier League, siendo su número 63, pero que solo es el segundo de esta temporada en la que está siendo fuertemente criticado.
Debió incluso golear el equipo y el Etihad creyó que era posible. Ni compareció el Leeds durante los primeros 45 minutos. Dominio total del centro del campo, con Nico González controlando la situación, y recuperaciones tan rápidas que a los de Farke no les daba tiempo ni para pensar. Un clásico de Guardiola, pero faltaban los goles. Justin le privó a Foden del segundo y fue la estrategia la que se lo brindó. Bueno, y la ayuda de Lucas Perri, que tras salir mal en un saque de esquina se la dejó a merced a Gvardiol (25′). Partido muy encaminado, pero el tercero no llegó y no por falta de oportunidades.
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CITY SUFRIÓ EN EL SEGUNDO TIEMPO
Lamentó el City la situación, pues la segunda mitad fue la sombra de la primera. A niveles catastróficos e incomprensibles, porque un simple cambio de sistema de Farke descentró a sus rivales, que perdidos en la presión ante una defensa de tres y dos puntas empezaron a perder terreno. Y sustituciones claves, pues Calvert-Lewin, que entró en el 46′, se convirtió en aquel jugador que deslumbró en el Everton con Ancelotti. Con ayuda de Nunes, que una vez más demostró sus carencias atrás. La regaló primero en la salida de balón y, tratando de recuperar, pecó de blando y se la dejó a placer al inglés para recortar distancias (49′).
Se le aparecieron los fantasmas a la plantilla ‘citizen’. Donnarumma tuvo que fingir molestias físicas para que Guardiola intentara ajustar a sus jugadores mientras asistían al meta. Pero ni así. Las presiones llegaban tarde, los carrileros hacían daño y Calvert-Lewin ganaba disputas. Y solo faltaba otro regalo, este de Gvardiol en un penalti tan claro como incomprensible. Se lo detuvo Donnarumma a Nmecha, pero con la mala fortuna que volvió el penalti a los pies del lanzador, que puso el empate para el Leeds (68′).
Un poco más de 20 minutos que se convirtieron en un correcalles de un duelo en el que Erling Haaland no compareció. El noruego casi ni participó y menos tuvo opción de remate claro. Y todo eso resta mucho al City. También unos cambios tardíos, especialmente un Marmoush que entró en el 89′. Últimos minutos abiertos y en los que precisamente tuvo un cabezazo el egipcio, detenido por Perri. Y se añadieron justo 10′ y solo necesitó uno el City, volcado, para ganar. Foden, en un nuevo latigazo (91′), confirmó haber renacido para dar unos importantes tres puntos tras un segundo tiempo para el olvido. O más bien para sacar conclusiones.
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