El mediocampista hondureño del Marathón, Francisco Martínez, lamentó que no pudieron llegar a la final del torneo Apertura y confiesa que lloró mucho al final del juego ante Olimpia.
“Agradecido con Dios, sabíamos que era difícil, pero demostramos que Marathón es una institución grande”, dijo Martínez.
Agregó “hubo lágrimas, queríamos despedir bien al profesor Manolo, pero no se pudo”.
Siguió explicando “fueron lágrimas de tristeza porque nos quedamos a un gol, pro hay que seguir trabajando”.
Sobre lo que hizo en el torneo Apertura dijo que es momento de agradecer a Dios y a Marathón que le dio la oportunidad de jugar en Liga Nacional.
“Estamos acá por Dios, por el trabajo, agradezco al profesor que me dio la confianza y creo que lo hicimos”, declaró.
Cerró diciendo “sabíamos al rival que enfrentamos, nos daban por muertos, pero demostramos la grandeza de Marathón”.